El cobre está presente en todo tipo de elementos, productos, aparatos… cada vez más necesarios para nuestra vida moderna, como son los productos de alta tecnología, las instalaciones eléctricas, los motores, etc.. pero, ¿conoces realmente la importancia de su correcto reciclaje?
En 2020, se reutilizaron 2,1 millones de toneladas de cobre, un 13% más en un año, procedentes de la recuperación de productos al final de su vida útil y de la refundición de desechos de fabricación. Este aumento del reciclaje de cobre viene impulsado por el uso creciente del metal en todo el mundo.
Reciclaje de cobre
Las fuentes de los residuos de cobre son tres:
- Propia o de origen: es la que se genera en la fábrica, refinería, o fundición. Normalmente se recupera y se usa en la misma planta de nuevo.
- Industrial: procede de recortes resultantes del proceso de elaboración de un producto.
- Obsoleta: es la que se origina en más cantidad. La forman productos que han finalizado su ciclo de vida funcional, como los residuos de construcción (procedentes de instalaciones de fontanería, calefacción, cables eléctricos); o equipos electrónicos y productos de latón (cobre+estaño).
Además, aplicado a la vida más moderna, el cobre no se queda atrás: está presente en todo tipo de aplicaciones cada vez más necesarias para nuestra vida moderna, como son los productos de alta tecnología, las instalaciones eléctricas, los motores, los sistemas de energía solar o los edificios inteligentes.
¿Cómo podemos reciclar el cobre?
El cobre puede ser reciclado en chatarrerías o gestores de residuos autorizados como es el caso de Trifeyme. Según la característica de cada material, el proceso a seguir para el tratamiento será diferente:
- Nuevo hilo: metal aplicado en instalaciones eléctricas y telecomunicaciones.
- Revuelto: metal de fontanería o instalaciones procedente de desmontaje de obra.
- Nuevo tubo o pletina: Cobre brillante en forma de tubo nuevo, pletinas nuevas, placas macizas, recortes, barras, tuberías, segmentos… procedente de sobrantes de producción o instalación.
- Viruta: sobrantes de cobre en forma de viruta procedentes del mecanizado, torneado y/o fresado de piezas.
- Calentadores: cobre sobrante de las calderas.
- Chatarra de motores eléctricos: Se trata de chatarra de motores eléctricos procedentes de máquinas, generadores o transformadores eléctricos libres de aceites.
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Recuperaciones Trifeyme somos una empresa autorizada por la comunidad de Madrid para tratar y gestionar cobre y todo tipo de residuos metálicos. Expedimos certificados de aceptación, destrucción y transporte.
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